El drop de una zapatilla se refiere a la diferencia de altura entre el talón y la parte delantera del pie, y es importante no confundirlo con el grosor de la mediasuela, que se refiere a la cantidad de material que hay entre el pie y el suelo. Cuanto mayor es el drop, más pronunciado es el ángulo entre estas dos partes.

Por ejemplo, cuando estamos descalzos, el talón y la parte delantera del pie están al mismo nivel, lo que significa que el drop es 0. En contraste, el drop es considerablemente mayor al usar tacones.

Este aspecto es un tema importante durante muchos años, ya que elegir un drop inadecuado, es decir, uno que no se ajuste a tu forma natural de pisar, puede incrementar el riesgo de lesiones. Un drop que no se adapte a tu pisada puede obligarte a cambiar tu forma de caminar, lo que a su vez puede generar un estrés excesivo en músculos y tendones. Esto podría ocasionar dolores y molestias inusuales que, con el tiempo, podrían derivar en problemas como tendinitis o periostitis.

Tipos de drop

En la actualidad, se identifican los siguientes tipos de drop:

  • El drop de 12 mm o alto es el tipo más común en la mayoría de las zapatillas convencionales, ya que ofrece una mayor amortiguación y protección. Sin embargo, al ser más pesadas, generan más impacto en las rodillas y las articulaciones, lo que puede provocar una sobrecarga en la zona lumbar.
  • El drop de 4 mm, o medio, da como resultado unas zapatillas ligeras y minimalistas, que favorecen una mejor conexión con el suelo y una técnica de carrera más natural. Son ideales para corredores que desean un equilibrio entre amortiguación y cercanía al suelo, lo que puede mejorar la eficiencia de la zancada y disminuir el riesgo de lesiones.
  • El drop de 0 a 4 mm, el bajo, es el rango considerado el «natural», ya que respeta los patrones naturales de movimiento y es igual a ir descalzo. Suelen denominarse barefoot.

Beneficios del drop 0

Veamos algunos beneficios del calzado con drop 0

  • Fomenta la postura natural. Su principal beneficio es que promueve una postura erguida y equilibrada al caminar y correr, imitando la sensación de estar descalzo. Esto evita inclinar el cuerpo hacia delante y favorece la alineación del pie con el tobillo y la pierna, lo que permite una distribución uniforme del peso y reduce la presión en las articulaciones.
  • Fortalecimiento de los músculos y los ligamentos. El calzado con drop bajo fortalece los músculos y los ligamentos al exigirles un mayor esfuerzo, lo que permite un movimiento natural y evita depender de la amortiguación y el soporte del talón, lo que previene debilidades a largo plazo.
  • Mejora el equilibrio y la coordinación. El uso de calzado sin caída obliga a los niños a activar más músculos y a mantener una mejor alineación corporal. Al caminar, deben adaptarse a diferentes terrenos, lo que les ayuda a desarrollar conciencia de su cuerpo y del entorno. Este tipo de calzado, con su planta plana, favorece el equilibrio y la coordinación al enfrentar a los músculos y al sistema sensorial a más desafíos. Con el tiempo, esto les permite evitar tropiezos y mejorar la precisión en sus movimientos y decisiones.
  • Adaptación biomecánica efectiva. El calzado sin drop se adapta a la mecánica natural del cuerpo y está diseñado para favorecer la biomecánica del pie y la pierna. Esto ayuda a los niños a desarrollar una técnica de caminar adecuada y a mejorar su percepción sensorial. Los niños experimentan una mayor movilidad y flexibilidad en el pie, lo que indica una buena adaptación biomecánica. Además, aumentan su capacidad de absorber impactos al caminar, correr o saltar, lo que mejora su rendimiento en actividades físicas y deportivas, y les permite utilizar plenamente sus habilidades motoras.

Recomendaciones sobre el drop en las zapatillas para niños

A continuación, veremos algunas recomendaciones para orientar, pero siempre es bueno consultar con un pediatra o un especialista en calzado infantil para obtener recomendaciones específicas según las necesidades de tu peque.

En primer lugar, en el caso de los bebés, es importante elegir calzado que les brinde un buen soporte y comodidad. Generalmente, se recomienda optar por zapatillas con un drop bajo o incluso el drop 0, ya que esto puede ayudar a fomentar un desarrollo natural del pie y una mejor postura al caminar.

  • El drop bajo es adecuado, en principio, para los niños que ya tienen experiencia corriendo.
  • El drop medio, en principio, es el más adecuado para la mayoría de los niños, ya que ofrece un buen equilibrio entre comodidad y estabilidad.
  • En cambio, el drop alto puede ser útil para niños que necesitan más soporte, especialmente si tienen problemas en los pies o están comenzando a correr.

Como puedes ver, elegir el calzado adecuado para los niños es fundamental y no debe dejarse al azar. Hay muchas opciones disponibles, pero algunas son más beneficiosas para su desarrollo que otras. Optar por un calzado sin drop ayuda a que el pie del niño se desarrolle correctamente y previene problemas de postura.

Un buen calzado no solo favorece el desarrollo saludable de los pies, sino que también contribuye al bienestar físico y emocional del niño mientras crece y explora su entorno. En nuestro catálogo encontrarás una gran variedad de opciones de calzado infantil respetuoso, ideal para los primeros pasos, la etapa de marcha inicial y la marcha estable. Además, contamos con marcas líderes en el sector que garantizan la calidad y la comodidad que los pies de tu peque necesitan.

Si este artículo te ha sido útil o tienes alguna pregunta, déjanos un comentario; estaremos encantados de responderte.

¡Nos vemos en la próxima!

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